domingo, 14 de diciembre de 2014

PODER CORRUPTO

El psicoanalista Philip Zimbardo desarollo un desagradable experimento con la intención de medir la profundidad del odio en el corazón humano. El experimento fue de tal magnitud que acabó afectando a sus investigadores tanto como a los sujetos control. Philip Zimbardo dividió a sus participantes en dos grupos llamados "prisioneros" y "oficiales". El proceso se realizó en una cárcel ficticia creada por los investigadores en el sótano de la Universidad de Stanford. Los prisioneros fueron arrestados, desnudados, desparasitados y se les afeitó la cabeza, entre otros abusos.Con esto se intentaba reflejar con la mayor veracidad y similitud posible a lo que ocurre y ha ocurrido durante siglos en muchas prisiones de todo el mundo. Los oficiales eran premiados por cumplir satisfactoriamente con la "misión" que se les había encargado. 

Al segundo día de experimento, los prisioneros se revelaron y la reacción de los oficiales fue rápida y brutalmente violenta. La rebeldía de los prisioneros duró poco tiempo y volvieron a comportarse bien y con una obediencia ciega, mientras los oficiales disfrutaban de sus roles provocando y abusando de su situación. Esto pudo confirmar científicamente la idea de que los humanos guardan dentro de sí tendencias malignas. El experimento, que estaba previsto realizarse en 14 días, duró sólo seis debido al irracional incremento del abuso por parte de los oficiales. 

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